Cuando construimos o remodelamos nuestros hogares, pocas veces nos detenemos a pensar en cuál es la mejor opción para la elección de vidrios y qué tipo nos conviene más. Una decisión correcta, como optar por ventanas con doble acristalamiento, puede evitarnos muchos dolores de cabeza y acarrearnos grandes beneficios, tanto en comodidad en las habitaciones como a nuestros bolsillos.
Las ventanas de doble acristalamiento están diseñadas para ser vidrios “ahorradores”, porque no permiten el intercambio de energía, es decir no habrá modificación de la temperatura interna a causa de la temperatura externa. Esto no sólo se refleja en la economía, sino que es benéfico para el medio ambiente.
- Aislamiento térmico: Reduce la pérdida de calor del interior en invierno
- Protección solar: Rechaza el calor del exterior hasta en un 57%.
- Eficiencia energética: Menor necesidad de calefacción o enfriamiento, protege el medio ambiente y permite ahorrar dinero.
- Confort visual: Maximiza la luz natural y reduce el deslumbramiento solar, proporcionando un mayor nivel de confort visual.
- Vidrios con apariencia neutrales. Existe una amplia gama de vidrios transparentes o de color.
- Confort acústico: el vidrio de doble acristalamiento ofrece un nivel medio de confort a ruidos exteriores.